domingo, 17 de enero de 2016

LITERATURA DEL ROMANTICISMO


La literatura del Romanticismo es el movimiento cultural literario que se produce a fines del siglo XVIII y se da a comienzos del siglo XIX en varios países europeos como Alemania, Francia y Reino Unido, se desarrolla a lo largo de todo el periodo decimonónico, y continúa ejerciendo su influencia, en varios de sus rasgos más característicos, hasta la actualidad.




LITERATURA ROMÁNTICA ALEMANA 
La literatura romántica alemana no fue un movimiento unitario. Por ello se habla de varias fases del Romanticismo. Una etapa fundamental fueron los años noventa del siglo XVIII, pero las últimas manifestaciones alcanzan hasta la mitad del siglo XIX.
Tuvieron gran importancia dos movimientos, el pietismo; el cual procuraba renovar la religión protestante volviendo a la religiosidad individual e íntima, frente a los aspectos más formalistas y teológicos del culto, para hacer la religión cada vez más un asunto del corazón y de la vida y no sólo de la inteligencia, y no sólo de la inteligencia, y otro de orden estético y anticlásico.
Algunos de los literarios románticos fueron Hermanos Schlegel, Tieck, Novalis, Brentano, Eichendorf, Chamizo, Arndt, Uhland, hermanos Grimm, Heine (“el último romántico”)




LITERATURA ROMÁNTICA FRANCESA

El Romanticismo francés tuvo su manifiesto en Alemania (1813) el gran precursor en el siglo XVIII fue Rousseau , autor de Confesiones y El contrato social, entre otras obras.

En el siglo XIX destacan Charles Nodier, Victor Hugo, Alexandre Dumas (tanto hijo como padre), entre otros; son los mayores representantes de esta estética literaria.

Junto a estos autores, cabe reseñar el resurgimiento de literaturas en lenguas no oficiales como la provenzal, en la que escribe el grupo Félibrige, acaudillado por el gran poeta Federico Mistral y que pretende restaurar la antigua poesía trovadoresca medieval. Entre sus obras cabe destacar la Mireya de Mistral. 

Las flores del mal

Charles Pierre Baudelaire





















LITERATURA ROMÁNTICA ESPAÑOLA

La literatura romántica española tuvo precedentes afrancesados ilustrados españoles como se aprecia en los poetas prerrománticos Manuel José Quintana, que reflejan una ideología ya presente en figuras disidentes del exilio.
Pero el lenguaje romántico propiamente tardó en ser asimilado debido a la reacción emprendida por Fernando VII tras la Guerra de la Independencia.
Se produciría más tarde un eco en el periódico barcelonés El Europeo, la defensa del Romanticismo moderado y tradicionalista del modelo de Böhl, negando decididamente las posturas neoclásicas, por parte de autores como Carlos Aribau y Ramón López Soler. En sus páginas se hace por primera vez una exposición de la literatura romántica a través de un artículo llamado “El Romanticismo”.
Un Romanticismo tardío, más íntimo y poco inclinado por temas político-sociales es el que aparece en la segunda mitad del siglo XIX con la obra de Gustavo Adolfo Bécquer.
 

Gustavo Adolfo Bécker



AMOR ETERNO

 Podrá nublarse el sol eternamente;
Podrá secarse en un instante el mar;
Podrá romperse el eje de la tierra
Como un débil cristal.
¡todo sucederá! Podrá la muerte
Cubrirme con su fúnebre crespón;
Pero jamás en mí podrá apagarse
La llama de tu amor.





 


LITERATURA ROMÁNTICA ITALIANA

La literatura romántica italiana tuvo su manifiesto en la Lettera semiseria di Grisostomo al suo figliolo de Guiovanni Berchet (1816) y destaca, sobre todo, por la figura de los escritores Ugo Foscolo (1778-1827), autor del famoso poema «Los sepulcros», y Giácomo Leopardi (1798-1837), cuyo pesimismo se vierte en composiciones como «A sí mismo», «El infinito» o «A Italia». El romanticismo italiano tuvo también una gran novela historica, I promessi sposi (Los novios), de Alessandro Manzonni.

Ugo Foscolo





  LITERATURA ROMÁNTICA RUSA

En Rusia, la literatura romántica supuso toda una revolución, pues autorizó como lengua literaria el idioma ruso, que hasta entonces estuvo poco cultivado. La gran figura del movimiento fue Alejandro Pushkin, acompañado de numerosos seguidores e imitadores. El primero en escribir un poema romántico fue Vasili Zhukovski (1783-1852) con “El cementerio de aldea”. Le siguió su discípulo Konstantin Bátiushkov (1787-1855) y los llamados poetas desembristas rusos, los revolucionarios Kondraty Ryléyev (1795-1826), Wilhelm Küchelbecker (1797-1846) y Aleksandr Bestúzhev (1797-1837). Tras el romanticismo filosófico del grupo Liubomudri, formado por el poeta Dimitri Venevitinov (1805-1827) el último gran romántico ruso es Fiódor Tiútchev (1803-1873).